jueves, 8 de abril de 2010

Días de asentimiento

Días de asentimiento.
Expansión, distensión.
Bendita paz hallada entre el silicio y los excipientes. ¿A qué te suena eso?
A donde vamos en los sueños es a la cueva en la montaña.
Bendita la nostalgia y bendito el olvido.
¿A dónde iremos cuando todas las retahílas se detengan?
¿En dónde desembocan los ríos de nuestras inteciones silenciosas?
El hombre que soy, este hombre vulgar.
Mis palabras son finas conductoras de apocalipsis y delirio.
Maldición trascendental, preludio a la reunión con el dios de nuestro salón.

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